martes, 11 de agosto de 2015

MI NO DESTETE





La lactancia es la experiencia más maravillosa y dura que he experimentado nunca (después del parto). Hoy te voy a hablar de nuestro NO DESTETE. Te conté hace un par de semanas aquí que, la peligrosidad de nuestro equilibrio, estaba poniendo nuestra lactancia en serias dudas. Unido a una mamá exhausta con un bebé de alta demanda, tenemos a un papá que se siente un poco al margen, y que se siente mal por no poder calmar al peque cuando lo necesita. Le hubiese encantado que el peque tuviese algo de la dependencia que tiene hacia mí, sentirse imprescindible de alguna forma. (Su tetita es lo más, y los demás están de sobra en el mundo cuando la tetita está a disposición).
Siempre he pensado que la consciencia en la crianza y el equilibrio familiar debían estar por encima. Aquí te conté la decisión que tomé, una decisión de destetar de forma un poco radical, (ya habíamos intentando un destete más progresivo y respetuoso, pero que no nos había conducido a ningún tipo de avance en mucho tiempo). Cuando hablo de radical, hablo de radical en las formas (untando el pecho con pimentón para que, por su sabor y aspecto el peque se diese cuenta de que no se podía tomar pechete a todas horas), pero no en la progresión, soy consciente que tanto el bebé como la mamá necesitan un periodo de adaptación, y no se pueden suprimir todas las tomas de la noche a la mañana.
La táctica del pimentón levantó un poco de controversia y no fue bien vista por todo el mundo. A pesar de eso, y de cómo se pueda ver, ha sido la única manera de hacer entender al peque que la teta necesitaba descansar en algunos momentos. De cualquier otra forma eran rabietas hasta límites que superaban más de lo que una mamá puede soportar, ver al peque desconsolado desgañitarse como si no hubiese un mañana era algo que no podía soportar, y que, desde luego, no entraba en mis planes.




El peque llevó muy bien el tema del destete, sin rabietas, sin enfados, y hasta con un punto de solidaridad con su pechete, que estaba malito, le habla, le saluda... incluso le ha estado ofreciendo generosamente a su muñeco Mickey todas las noches.
Hasta estos días en los que la dichosa muela ha empezado a guerrear había sentido que, al fin, habíamos alcanzado un punto de equilibrio, en el que el peque seguía teniendo su pechete en ocasiones, el papi tomaba más protagonismo y mamá recuperaba algunos minutos al día de espacio personal.



Quizá el error ha sido mío de no saber cortar esa toma que quedaba todos los días, pero mi mente no me dejaba suprimirla, así que, como me voy guiando por instintos, la mantuve.  Creo que algo de mi sabía que aun no era el momento para nadie de retirar el pecho definitivamente, aunque tengo que decir que las noches han mejorado pero que muy mucho. Practicamente no hace ninguna toma, pero sí que tiene que tocar o acariciar el pecho para relajarse, creo que es una manera de sentir que sigue teniendo esa conexión con mamá, aúnque no tome pecho.
El peque, que tonto no es, creo que se ha ido dando cuenta un poco de la jugada.

Ahora estamos atravesando, de nuevo, por días complicados, con una dichosa muela (que nos está amargando la existencia a él y a mi) y llámame blandengue, pero viendo lo mal que lo está pasando he sucumbido a la tentación y he reestablecido tomas...
Aissss!!!!  no se si retroceder  habrá sido lo mejor, pero siempre tuve claro, que no quería que el peque lo pasara mal con el destete, (siempre lo vi como una decisión que nos conduciría a un mayor bienestar de toda la familia, incluido a él). Hasta ahora, no lo había hecho, pero sentía que estos días lo necesitaba, y como madre no he podido negárselo, su carita de dolor y su necesidad me podían por encima de cualquier otro motivo. Así que, después de consensuar con el papá, hemos vuelto a caer. No obstante tratamos de llevar un orden. De tal manera que no se vuelva a una situación de caos, como antes.

Y es que, para dejar la teta también la mamá tiene que estar preparada mentalmente. Sólo quería acabar con esa dependencia día y noche que nos tenía a todos exhaustos, pero... ¿Dejar de dar la teta? Me producía una enorme tristeza...

¿De ahora, en adelante qué voy a hacer? 
 Voy a seguir con la operación destete, no podemos volver a la situación caótica de antes, creo que era un círculo vicioso para el peque y para nosotros. Francamente ninguno de nosotros podíamos seguir con el ritmo que teníamos hasta ahora. La dependencia era tal, que no podíamos tener un equilibrio, ni el peque, ni nosotros.

Pero ¿sabes qué? Me lo voy a tomar con calma, como dice el refrán;  
"Vísteme despacio que tengo prisa"
Vamos a ir suprimiendo tomas, pero no va a ser algo a rajatabla, (voy a seguir con la misma técnica, se podrá ver bien o mal, pero, de verdad, que nos ha funcionado genial).

En estos días he visto que realmente lo necesitaba, y hemos retrocedido en la operación, pero no importa.
Iremos dando pasitos poco a poco, y cuando estemos preparados ambos lo dejaremos. Acabar con la tetita en una lactancia de tantos meses es más duro de lo que parece. Estoy de acuerdo con que la lactancia tiene sus luces y sus sombras, no es fácil, pero reporta momentos de tanta satisfacción... Ver, que como madre, tienes el poder para reconfortar a tu hijo y calmarle cuando lo está pasando mal (por cualquier circunstancia) que cuesta infinito perder ese super poder de la noche a la mañana.

En la cabecera del post, he puesto una foto de un cuento que me produce infinita ternura; CORAZÓN DE MADRE. Ya te hablé de él en facebook. Habla sobre los sentimientos de una madre hacia un hijo, está explicado de manera sencilla, pero hermosa.  Hemos empezado con él, a la vez que la operación destete, mi misión era ayudar a comprender al peque que pase lo que pase, sin teta o con teta, tendrá el mismo cobijo y consuelo en mamá.

Y los que me seguís en facebook también habréis visto otro de mis cuentos favoritos para la operación destete. LA TETA CANSADA, que puedes descargar gratis en versión pdf en la página dormir sin llorar.

Creo que todas las palabras, recursos, y explicaciones que ayuden al peque a comprender la situación serán muy positivas. 



Si algo he aprendido de todos estos meses de lactancia es que el instinto de  una madre núnca se equivoca, y nadie mejor que una madre para saber que es lo mejor para el bebé




¿Cómo están siendo vuestras lactancias? ¿Te has planteado el destete?








8 comentarios:

  1. Yo también estoy quitando tomas poco a poco, No ofrezco pero tampoco niego, así que siempre tengo comida para ofrecer. Un camino lento....
    Mucha fuerza!

    ResponderEliminar
  2. Yo pienso que nadie mejor que tú sabe lo que necesita Rayito y vuestra familia! Ánimo sea cual sea el rumbo que tome el destete-no-destete ;)

    Feliz día!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias!! Aunque no hemos destetado estamos mucho mejor, el peque tiene menos dependencia, el papa mas seguro con.Rayito, yo mas sosegada...y no hemos perdido la teta, para mi un triunfo,perder la lactancia era lo que menos queria pero sentia que la situacion.se nos iba de las manos, ahora todo fluye

      Eliminar
  3. Hola soy Maria y empezaré el destete me encantaNo tus post porque me identifico a mil. Dime lograste hacer el destete totalmente? Finalmente cuanto tiempo te tomó la segunda operación destete? Gracias

    ResponderEliminar
  4. Hola soy Amalia,tengo un bebe d 16 meses y me pasa exactamente lo mismo q a ti.Yo comence a trabajar, pero el niño no quiere adaptarse en el cuido puesextraña la teta.En estos dias he estado suprimiendo tomas ,pero me doy cuenta q soy yo la q no esta preparada para dejar la lactancia.Muchas gracias por esta publicacion me he identificado mucho con ella

    ResponderEliminar

Gracias por tu comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Blogging tips